Madrid Manchester City: Oportunidad perdida, aunque nadie lo vea

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Antes de hablar del partido de ayer, debería empezar diciendo que yo soy un tío optimista "en la vida", pero en temas de fútbol siempre me pongo en lo peor. Las eliminatorias hay que matarlas, cuando tienes una puerta abierta tienes que cruzarla, no vale quedarse sujetándola con el pie simplemente para que no se cierre. Si la chica te mira, tienes que entrarla, no vale sólo con mirarla, aunque le gustes puede que no vuelva el sábado siguiente a la discoteca.

Esa es mi sensación del partido de ayer. Se aprendió de Wolfsburgo y Vallecas. Nunca ha defendido el Madrid tan bien en toda la temporada: porteria a cero, control de la primera parte y a marcar en la segunda. ¿A marcar en la segunda? Faltó esa parte, que era la más importante, del plan. Ese gol que fuera de casa en Europa vale quíntuple, mucho más que doble (a pesar de la frase hecha).

Se intentó a balón parado, y casi se consigue. Espectacular Joe Hart con sus paradas de portero de balonmano (es la forma de despejar los remates a bocajarro). Se echó de menos a Cristiano y Benzemá; dice mi padre (que sabe mucho de fútbol, pero no se lo voy a decir, que se le sube a la cabeza) y el 99% de los medios que con CR y Karim se hubiera marcado. Yo que sé, en Wolfsburgo estaba Cristiano y el Madrid acabó con un rosco.

Pero el cambio era James por Benzema. No Jesé. El partido estaba para el colombiano, tocaba romperlo y los goles del Madrid valían más que los suyos. Tres tíos rápidos con un solo lanzador atrás -Modric- no es lo que tocaba. Menos aún teniendo en cuenta el City ya había renunciado al balón con la lesión de David Silva. Zidane estuvo lento leyendo el partido, o temeroso o simplemente inexperto. Tuvo miedo a cambiar lo que estaba funcionando, pero tocaba que el partido se rompiera la última media hora, ya no tocaba controlar, era importante para la clasificación a Milán.

¿Ocho días son suficientes para la reparación muscular completa del siete? Esperemos que sí. Si llega será el día en el que se juegue el Balón de Oro 2016, y eso para él es mucho. Viendo como está últimamente, a nivel actitud y su impacto en el equipo, puede ser clave. Sin embargo, que nadie olvide que en Madrid el Real tiene que salir igual que en el Etihad: a controlar el partido y buscando el 0 en el casillero visitante del video-marcador. El problema es que cuando se salga a matar -a entrar a la chica- el riesgo es mayor que ayer, el error se penalizaría más. Ayer era el momento, ¿por qué los equipos aún no han aprendido que arriegar fuera tiene más premio y menos riesgo?

La eliminatoria sigue al 50%. Ese es el problema...

Escrito por: Carlos López Vivas.
@OpinionDeporte