En cada uno de los órdenes de la vida, y más concretamente dentro de los deportes, tratamos de elegir al mejor del mundo dentro de cada disciplina.Es una forma de establecer una referencia para así poder valorar a los demás.En algunos deportes es bastante más fácil elegirlo que en otros, fundamentalmente en los deportes individuales: nadie duda de que Usain Bolt es el mejor en 100 metros, nadie ha sido más rápido que él en la historia. Son datos objetivos en base a resultados individuales.
Cuando se trata de deportes de equipo, y el que más repercusión tiene es el fútbol, es más difícil establecer quién lo es. Al fútbol juegan once en el mismo equipo, y aunque se diferencia claramente quiénes son los más destacados, hay muchas variables que intervienen aunque una está por encima de las demás: para ser el mejor jugador del mundo necesita de un buen equipo para poder demostrarlo.
¿Y quién es el mejor jugador? ¿El que más títulos gana? ¿El que más goles mete? ¿El que mejor para? ¿El que mejor defiende? ¿El más habilidoso? ¿El que mejor hace jugar a su equipo? ¿El más decisivo en los momentos importantes? Como se puede ver, no es fácil.
Respecto al mejor entrenador sí que tengo una opinión más clara. Para ser un buen entrenador hay varias cosas que se tienen que conjugar: saber llevar bien un grupo, ser un buen motivador, tener conocimientos tácticos y estratégicos, y saber leer bien los partidos en función de las situaciones que se presentan. Es evidente que debes disponer también de un buen equipo en el campo: los jugadores, si los sabes aprovechar, te pueden dar grandes resultados, y si tienes a los mejores del mundo, más fácil aún.
Todas estas cosas son muy importantes, y el entrenador que las reúna tiene muchas papeletas para ser un gran entrenador, pero en mi opinión, para ser el mejor entrenador, tienes que haberlo demostrado en varios equipos, y en varias ligas diferentes.
En el fútbol ha habido y hay grandes entrenadores, algunos han destacado por saber llevar un grupo y dejar libertad a los jugadores (Di Stéfano, Molowny, Luis Aragonés, Vicente del Bosque), otros han destacado por ser innovadores tácticos (Arrigo Sacchi, Johan Cruyff), otros son los mejores en el conocimiento de una idea de jugar, de una forma de entender este deporte y llevan el juego, y muy bien por cierto, a la máxima expresión de lo que debe ser el juego (Bielsa, y por encima de todos, Pep Guardiola).
Pero para mi el mejor entrenador es Mourinho. Es el único que ha conseguido ganar títulos importantes con diferentes equipos de distintas ligas, el único que ha adaptado sus conocimientos a la cultura del equipo que entrenaba, el único que ha trabajado con más de dos sistemas tácticos diferentes en función de las diferentes posibilidades que pueda presentar el equipo al que entrene.
Me gustaría que el lector de este artículo se ciñera a lo meramente deportivo, olvidemos sus formas equivocadas en determinados momentos, el equipo al que entrena, y tengamos empatía pensando en que dentro de su carácter no va la hipocresía.
Es posible que este artículo pueda presentar diferentes opiniones, ya que existe otro gran entrenador en el fútbol actual que es Pep Guardiola. Para mi el Barcelona, con Guardiola a la cabeza, es el equipo que mejor ha jugado y sigue jugando al fútbol en la actualidad, si por jugar bien al fútbol entendemos la combinación y la posesión del balón como máxima expresión del juego. Guardiola es el segundo mejor entrenador que hay, para que sea el mejor tendremos que verle entrenar en la liga italiana y en la inglesa para valorar si consigue los mismos resultados con jugadores diferentes. Mou ya lo hizo…
Escrito por: Pablo Ortega
